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Escritora original: Callie Freeman
Traducido por: Caroline Narvaez y Christine Sui
Después del esfuerzo de la Universidad para recolectar fondos, la tecnología y reactivos, los investigadores del Sistema de Salud de la Universidad han desarrollado independientemente una prueba para el COVID-19 que está siendo usado a través del Sistema de Salud de la Universidad y en los hospitales en el Commonwealth.
Cuando Amy Mathers, la profesora asociada de medicina e investigadora de enfermedades infecciosas y salud internacional, primero estaba respondiendo a la pandemia del COVID-19, su meta fue obtener pruebas con los tiempos de resultados más rápidos para que los investigadores puedan aprender más sobre cómo contener el virus.
Anteriormente, el Sistem de Salud de la Universidad solamente usaba las pruebas de los departamentos de salud pública, que solo tenían para los pacientes más enfermos y los pacientes de alto riesgo, y de las compañías privadas cómo LabCorp, que tiene un tiempo de resultado de hasta 9 días.
Mathers, junto con Mendy Poulter, la profesora asociada de patología y directora de la clínica de microbiología, rápidamente recolectaron los materiales para las pruebas y trajeron ensayos moleculares, y herramientas diagnósticas usadas para hacer análisis biológicos para crear las pruebas de COVID-19.
Varios investigadores de la Universidad donaron sus tecnologías y materiales, mientras otros del Sistema de Salud recolectaron fondos para el desarrollo de la prueba.
Poco después, Mathers, Poulter y el equipo terminaron de desarrollar la prueba con rapidez, pero aunque la prueba en actualidad tiene un tiempo de resultado de menos de 24 horas, el equipo está trabajando para tener un tiempo de resultado de 2 horas para los pacientes en los hogares y 12 horas para las pruebas de los hospitales.
Patrick Jackson, un médico de la Universidad en enfermedades infecciosas y salud internacional, explicó cómo funciona la prueba.
“La prueba que tenemos en U.Va. es la prueba de tiempo real de PCR”, dijo Jackson. “Tiene que tomar una muestra de la nariz o boca, obtener el ARN, sondear el ARN con cebadores cortos que son complementarios al genoma [del virus], y si se emparejan, puede recibir un aumento en la seña con PCR, [que es] cuando se puede saber si una persona tiene el virus”.
Jackson reconoce la importancia de tener rápidos tiempos de resultados.
“U.Va. es uno de los líderes en el país que ha mejorado las pruebas con rapidez para investigar casos pendientes” ,dijo Jackson.
Las pruebas en el Sistema de Salud de la Universidad empezaron la semana pasada con aproximadamente 100 pruebas cada dia con la expectativa de llegar a 500 pruebas cada dia despues de recibir una donación de un millon de dolares del Quantitative Foundation, una organización basada en Charlottesville que proporciona fondos para proyectos de investigaciones.
Las pruebas adicionales continuarán siendo usadas para los pacientes internados a través de los hospitales de Virginia, y los pacientes en los estados circundantes, el personal médico, y los despachadores de emergencias que tienen los síntomas.
A partir del martes por la noche, el Sistema de Salud está ofreciendo 50 pruebas cada dia para cinco hospitales adicionales a través de Virginia y uno en Carolina del Norte para los pacientes internados que cumplen con los lineamientos para tomar la prueba. Estos hospitales han recibido información sobre cómo solicitar la prueba para sus pacientes a través de un memo de un hospital de Virginia y Healthcare Association [Asociación de cuidado de salud].
“Nuestra esperanza es que proporcionando estas pruebas ayudará a hospitales a lo largo del Commonwealth en cuidando de sus pacientes y respondiendo a esta pandemia”, dijo K. Craig Kent, vicepresidente ejecutivo de asuntos de salud de la Universidad, en un comunicado de prensa del Sistema de Salud de la Universidad. "También esperamos que esto ayude a ahorrar equipos personales de protección y otros recursos críticos para las necesidades de salud pública de Virginia".
Jackson confirmó la importancia de las pruebas y enfatiza su importancia en la reducción de la propagación del virus.
A partir del 26 de marzo, Virginia tiene 460 casos reportados de COVID-19, con 23 de ellos en el Distrito de Salud Thomas Jefferson, que incluye la ciudad de Charlottesville y Albemarle, Fluvanna, Greene, Louisa y Nelson. El Sistema de Salud de la Universidad está tratando actualmente a cuatro pacientes de COVID-19 que están en aislamiento y están siguiendo las pautas del Departamento de Salud de Virginia.
"Si estás en el modo de tener un brote de cualquier tipo de patógeno, averiguar qué personas lo tienen, aislarlos y reducir la propagación es muy importante", dijo Jackson.
Las pruebas también son clave para identificar y tratar a los más vulnerables al COVID-19, según Jackson. Como se describe en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, se trata de personas con enfermedades subyacentes graves como enfermedades cardíacas y pulmonares, los mayores de 65 años y las mujeres embarazadas.
La efusión del apoyo de la Universidad a través de tecnología, suministros y financiamiento fue esencial para el desarrollo rápido de la prueba ya que las herramientas que Mathers y Poulter necesitaban para desarrollar la prueba no estaban fácilmente disponibles, sobre todo los reactivos y hisopos de prueba. Los reactivos son mezclas químicas utilizadas para determinar si una muestra de prueba coincide con la secuencia del genoma de COVID-19, y hasta ahora, han sido suministrados a laboratorios por empresas privadas. Sin embargo, estas empresas han estado cancelando órdenes a instituciones de investigación y a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
“El suministro de reactivos en sí se parece mucho al estante de papel higiénico de Walmart", dijo Mathers. "No puedes obtener las máquinas y los suministros, y hay una escasez de hisopos”.
Según Mathers, los hisopos de prueba de COVID-19 no son los hisopos tradicionales de algodón que uno podría ver en la oficina de un médico, sino que requieren un material especial llamado Rayon que no degrada el ARN del virus como lo hace el algodón. Estos tipos de hisopo son difíciles de encontrar y difíciles de crear, según Mathers.
A causa de que los suministros de prueba y los recursos médicos son generalmente bajos en los Estados Unidos, es clave mantener la cadena de suministro y garantizar que no se utilicen recursos limitados en aquellos que no están muy enfermos o en alto riesgo, según Mathers.
“Nosotros [en los Estados Unidos] no tenemos suficientes kits de prueba para probar a las personas más enfermas", dijo Mathers. "No tenemos suficiente cadena de suministro, y parece ser que los recursos se han canalizado en líneas de impulso para personas sanas, que pueden ser más políticamente aceptables".
Para aquellos con síntomas de COVID-19 como fiebre, tos y falta de aliento, contacte a su médico de atención primaria para determinar si se necesitan las pruebas. Para ver información específica sobre las pruebas a través del Sistema de Salud de la Universidad, consulte la página COVID-19 de su sitio web.