El artículo no expresa las opiniones o posiciones de los traductores. El artículo es una versión traducida del artículo que se encuentra a continuación: enlace
Escritxr original: Jacob Woodford
Traducido por: Chelsea Edwards y Susan Silva
Las estudiantes de segundo año de ingeniería Dianna Damenova y Connie Zhang establecieron un capítulo de Women in Cybersecurity [Mujeres en ciberseguridad] (WiCyS) en la Universidad el 2 de febrero. Fue su deseo compartido de empoderar y conectar a las estudiantes fuera del salón de clases lo que las llevó a crear el grupo, que se enfoca en reunir a mujeres interesadas en la ciberseguridad y darles la confianza para seguir una carrera en un campo dominado por los hombres.
Las dos amigas desarrollaron una pasión por la ciberseguridad durante la escuela secundaria a través de su participación en el programa CyberPatriot, una competencia nacional con el objetivo de ayudar a los estudiantes a seguir una carrera en ciberseguridad, y pasantías de verano dentro del ámbito. Damenova, quien es vicepresidenta de WiCyS, ayudó a establecer un equipo de ciberseguridad solo para niñas en su escuela secundaria, mientras que la presidenta del capítulo, Zhang, tuvo experiencias similares con su introducción a la ciberseguridad, enamorándose de la misión detrás del campo y de la importancia nacional de la ciberseguridad en general.
Su pasión sólo continuó creciendo cuando ingresaron a la universidad. Las dos se conocieron durante su primer año y rápidamente notaron la falta de una comunidad para mujeres en ciberseguridad en la Universidad.
Tanto Damenova como Zhang sabían el impacto positivo que tenía estar rodeadas de una comunidad acogedora en su motivación para seguir una carrera en STEM. Con su deseo compartido de brindar a las mujeres en ciberseguridad una comunidad propia, se acercaron a Mujeres en Ciberseguridad, una organización nacional fundada en 2012 a través de una subvención de la National Science Foundation con el propósito de alentar a las mujeres a seguir una carrera en ciberseguridad. Las dos estudiantes establecieron un cabildo en la Universidad para ayudar a construir un espacio acogedor aquí.
“Queríamos unir a las mujeres y animarlas a que se interesaran por la ciberseguridad y también a ganar la confianza para hacerlo”, dijo Zhang. “Hay muchas cosas detrás de escena que no necesariamente sabíamos acerca de [crear un CIO], pero honestamente, lo que nos ha hecho seguir adelante es solo la misión de unirnos y crear una comunidad de apoyo donde las personas puedan aprender, cometen errores y aumentar su interés en la ciberseguridad".
Con una organización abierta a estudiantes de todos los niveles de experiencia, desde el nivel altamente calificado hasta el nivel principiante, Mujeres en Ciberseguridad ofrece una comunidad donde sus miembros pueden compartir conocimientos y desarrollar conexiones con quienes comparten intereses similares.
“Para nosotros se trata de la comunidad”, dijo Damenova. “Es muy gratificante conocer a todas las mujeres increíbles de la industria en U.Va. en términos de estudiantes, profesores y personas en investigación”.
Al organizar varios eventos sociales y profesionales, como concursos de ciberseguridad e invitar a profesionales a hablar con sus miembros, Zhang y Damenova esperan promover un espacio para que sus miembros se conecten y compartan conocimientos.
Incluso con su experiencia previa, las dos estudiantes sabían que necesitaban el apoyo de un miembro de la facultad para que su organización prosperará, y encontraron este modelo a seguir en Angela Orebaugh, profesora asistente en el departamento de informática de la Escuela de Ingeniería.
“Creo que el Profesor Orebaugh fue el primer persona que realmente nos animaba a comenzar este capítulo”, dijo Zhang. “Cuando planteamos inicialmente la idea, ella era muy abierta y quería conectarnos con personas en la industria o los recursos de la Universidad, por lo que realmente ha sido muy útil para guiarnos hacia lo que los estudiantes pueden querer, y tender un puente sobre esa perspectiva de la industria y academia”.
A lo largo de su tiempo trabajando dentro del campo de seguridad cibernética, Orebaugh ha experimentado de primera mano la falta de una comunidad para las mujeres dentro de los campos STEM, ya que a menudo era la única mujer en su equipo de ciberseguridad.
Los hombres superan numéricamente las mujeres en la ciberseguridad por tres a uno, e incluso los cambios en la última década han visto a las mujeres representan solo el 24 por ciento de la personal de seguridad cibernética y reclaman posiciones de liderazgo a un ritmo más alto, según un estudio realizado por la (ISC)2 Personal de Seguridad cibernética.
Orebaugh utiliza su posición en la Universidad para hacer su parte para animar este crecimiento dentro del cuerpo de estudiantes.
“A través de los años he tenido tantas mujeres, ya sean estudiantes o las que ya están en la fuerza laboral, me expresan su interés en la cibernética, pero también expresan sus inquietudes y preocupaciones por ingresar al campo'', dijo Orebaugh en un correo electrónico al Cavalier Daily. “Mientras ganamos más mujeres como modelos a seguir en el campo, podemos trabajar juntos para ayudar a crecer el número de mujeres no solo en el campo de seguridad cibernética, sino en los campos de STEM en general por crear culturas de diversidad e inclusión”.
Las creencias de Orebaugh son compartidas por muchos en la Universidad, con innumerables estudiantes y facultad que sirven como estos modelos a seguir por establecer varios CIO en Grounds, todos que apuntan a proveer las mujeres con oportunidades de networking y animo a seguir sus pasiones y dejar su huella en un campo dominado por los hombres.
Las Mujeres en STEM, una de las organizaciones ya mencionadas, fue establecida en la Universidad como un CIO en 2018 y es dirigida actualmente por una estudiante de tercer año, Nicole Avidon. Avidon se unió a Women in STEM durante su año de fundación, desarrollando una conexión fuerte a la misión de la organización.
“Nuestra misión en total solo es construir una comunidad de mujeres que tienen interés en cualquier campo de STEM, para que no nos limitemos a un área en particular dentro de STEM'', dijo Avidon. “Solo queremos construir una comunidad, socialmente y profesionalmente, que nuestros miembros puedan apoyarse cuando los necesiten”.
Las Mujeres en STEM organizan varios eventos sociales y profesionales para sus miembros, como noches de juego frecuentes, así como ocasionalmente se asocian con el Centro de las Carreras de U.Va. y organizaciones locales para hacer talleres de resumen.
Avidon espera continuar expandiendo aún más el alcance de la organización no solo colaborando con las varias otras organizaciones para las mujeres en STEM en Grounds, sino también potencialmente trabajando con universidades locales para aumentar la comunidad que los han establecido.
“Uno de los problemas a los que nos enfrentamos es que la seguridad cibernética solo va a crecer'', dijo Damenova. “Entonces cuantas más perspectivas diversas, más personas participan”.