El artículo no expresa las opiniones o posiciones de los traductores. El artículo es una versión traducida del artículo que se encuentra a continuación: enlace
Escritor original: Tanner Kissler
Traducido por: Giuliana Rejalaga y Leon Arceo
La Universidad no cancelará la matrícula de estudiantes que no reciben el refuerzo de la vacuna contra el COVID-19, por un correo electrónico que fue enviado a toda la universidad el lunes por la noche por el presidente de la universidad Jim Ryan, la rectora Liz Magil, el director de operaciones J.J. Davis y K. Craig Kent, vicepresidente ejecutivo de asuntos de salud y el director general de U.Va. Salud. Los anuncios llegan tras la opinión consultiva del fiscal general Jason Miyares, el viernes declaró que colegios públicos y universidades no tienen autoridad legal para requerir que los estudiantes reciban la vacuna contra COVID-19 para ser inscritos o asistir a clases en persona.
“Las opiniones del fiscal general, aunque no tienen la fuerza de la ley en la manera de una sentencia judicial, sin embargo merece una cuidadosa consideración”, el correo electrónico lee.
La opinión de Miyares difiere de la del anterior fiscal general Mark Herring, quien dijo en abril pasado que de hecho las universidades tienen autoridad legal de hacer un mandato sobre la vacuna contra COVID-19. Esta opinión sirvió de contexto legal para el mandato de vacunación de la Universidad para los estudiantes antes del otoño.
Cualquier persona que viva, estudie o trabaje en Grounds también debía recibir un refuerzo antes de regresar el 14 de enero. La Universidad rescindió este requisito para el personal docente y administrativo el 19 de enero siguiendo la orden ejecutiva del gobernador Glenn Youngkin.
Más del 99 por ciento de los estudiantes ya cumplieron con el requisito de refuerzo de la vacuna, según el correo electrónico. Otras escuelas de Virginia, incluidas la Universidad George Mason y Virginia Tech, ya han revertido los mandatos de vacunas. El otoño pasado, la Universidad canceló la matrícula de 238 estudiantes por no cumplir con el requisito de vacunación.
Los mandatos actuales sobre el uso de mascarillas y otras políticas de salud pública permanecerán vigentes, incluida una prohibición temporal de alimentos y bebidas en eventos como competencias deportivas. La Universidad planea reevaluar esta política antes del 4 de febrero.
“Estos no han sido dos años que ninguno de nosotros hubiera pedido o esperado, pero ha sido un momento en el que, por muy difícil que haya sido, hemos demostrado cómo se ve cuando una comunidad se une para superar algo difícil”, dice el correo electrónico. “Y por todo eso, tienen nuestro profundo agradecimiento”.